HENRI 2

Los vaporizadores tienen varias ventajas sobre los generadores de vapor:

• Facilidad de uso: las planchas de vapor son fáciles de usar y se ponen en marcha rápidamente, sin necesidad de tabla de planchar, lo que permite planchar la ropa de forma rápida y sencilla.
• Portabilidad: Su diseño compacto y liviano los hace fáciles de almacenar y transportar, ideales para espacios pequeños y viajes.
• Versatilidad: aptos para diferentes tejidos, incluidos los más delicados, los vaporizadores también pueden refrescar cortinas y tapizados, ofreciendo un uso más variado.
• Seguridad: reducen el riesgo de quemar la ropa, ya que no requieren contacto directo con la suela caliente.
• Mantenimiento reducido: menos propensos a la cal, los vaporizadores requieren menos mantenimiento en comparación con los generadores de vapor.
• Ideal para retoques: perfectas para retoques rápidos en una o dos prendas, las planchas de vapor son una solución práctica para un uso diario ligero.

Por tanto, los vaporizadores son perfectos para quienes buscan una solución práctica, rápida y sencilla para eliminar las arrugas de la ropa y diversos textiles.

La elección del vaporizador depende de tus necesidades y de tu presupuesto.
Para un uso ocasional y retoques rápidos, una vaporera portátil (de mano) será suficiente.
Para un uso regular y un gran volumen de ropa, opte por una vaporera vertical (de pie).
Para tejidos delicados y arrugas difíciles, elija un dispositivo con buena potencia y una alta salida de vapor.
Para facilitar su uso, elija un modelo ergonómico equipado con prácticos accesorios.

Existen varios tipos de vaporizadores de prendas, cada uno de los cuales está diseñado para satisfacer necesidades específicas de cuidado de la ropa. Estos son los principales tipos de vaporizadores disponibles:
- Vaporeras portátiles (o de mano): estos modelos son compactos, ligeros y fáciles de manejar. Son perfectos para viajes o uso rápido en casa. Su depósito de agua suele tener una capacidad pequeña, lo que los hace adecuados para retoques rápidos.
- Vaporeras verticales (o independientes): estos modelos son más grandes y están equipados con un tanque de agua más grande. Se montan sobre un soporte o rejilla y, a menudo, incluyen una percha incorporada, lo que permite cocinar la ropa al vapor directamente sobre la rejilla.
- Vaporeras Profesionales: estos aparatos están diseñados para un uso intensivo y suelen utilizarse en entornos comerciales como hoteles, tiendas de ropa o talleres de costura. Son robustos, potentes y cuentan con depósitos de agua de gran capacidad.
- Planchas de Vapor Combinadas (Plancha/Vaporizador de Ropa): estos modelos híbridos combinan las funcionalidades de una plancha tradicional y un vaporizador de vapor. Se pueden utilizar tanto en plano como una plancha como en vertical como una vaporera. Nuestro modelo estrella es el SteamCube.

El vaporizador se utiliza en posición vertical para evitar la condensación en la tubería y obtener una óptima difusión del vapor. Sólo ciertos modelos como SteamCube se pueden usar en posición horizontal sobre una tabla de planchar.
1/ Primero llene el tanque y luego presione el botón “on”.
2/ Esperar el tiempo indicado antes de utilizarlo.
3/ Luego coloca tu prenda en una percha, abotona si es necesario y cuélgala en el soporte para perchas integrado.
4/ Sujeta la parte inferior de tu prenda para tensar el tejido y pasa el cabezal difusor, tocando el tejido para que el vapor atraviese las fibras y las relaje. No dudes en quitar la ropa de la barra telescópica. Para mangas y cuellos de camisas, utilice el accesorio previsto a tal efecto.
5/ Repetir la operación tantas veces como sea necesario.

Para obtener una guía completa, consulte nuestra página "¿Cómo utilizar Steam?".

Nuestros vaporizadores ofrecen una solución versátil y segura para eliminar arrugas e higienizar todo tipo de prendas (materiales delicados como seda, cachemir y lana, así como textiles más resistentes como algodón y mezclilla). También son perfectos para refrescar tus sofás, cojines, ropa de cama, manteles y cortinas. Con los diferentes modos de potencia podrás adaptar fácilmente el flujo de vapor a cada material y garantizar un cuidado óptimo para cada tipo de tejido.
El vapor, por ejemplo, evita pulir los trajes. Esto le permitirá ahorrar dinero en limpieza en seco.