Planchar es algo que todos hemos hecho alguna vez. Sin embargo, ¡no deja de ser una tarea tediosa y, a veces, incluso hace perder mucho tiempo! Por suerte, tenemos algunos consejos que te harán la vida más fácil y te ayudarán a planchar la ropa en un abrir y cerrar de ojos. En este artículo compartimos nuestros cinco mejores consejos para planchar la ropa de forma rápida y eficaz.
Ajusta gradualmente la temperatura de la plancha
¿Se pega tu plancha a tus prendas favoritas y las estropea?
Eso suele ocurrir si no has ajustado la temperatura al tejido de la ropa. No obstante, incluso después de ajustarla, si no esperas unos minutos y empiezas a planchar pantalones y camisas de inmediato, es posible que se peguen a la plancha caliente. Hay una solución relativamente sencilla para este problema: empieza siempre con un ajuste bajo.
Si no estás seguro de cuál es el ajuste correcto, empieza con la temperatura más baja y cambia gradualmente a una temperatura más alta para evitar que el calor queme la ropa. Procura también evitar el contacto directo con cremalleras, botones, etc. para no rayar la suela. Eso podría dañar el revestimiento antiadherente y dificultar un planchado limpio y uniforme.
Cambia la temperatura para cada tejido
¿Tienes un generador de vapor o una plancha con ajuste de calor constante? Entonces no hace falta que elijas o ajustes la temperatura de la plancha.
Si tienes una plancha convencional o un generador de vapor, primero separa la ropa por tipo de tejido. Empieza con la temperatura más fría y ve subiendo hasta llegar a la de los vaqueros y los tejidos más gruesos.
- Para la seda ligeramente humedecida, utiliza una temperatura baja y nada de vapor.
- Lana, poliéster y viscosa: vapor moderado y temperatura media.
- Algodón y lino: utiliza la plancha caliente sobre las prendas ligeramente humedecidas.
Utiliza agua desionizada
¿Tienes problemas para planchar la ropa con suavidad y eficacia?
Para ahorrar tiempo al planchar, rocía las prendas con agua desionizada. Los tejidos ligeramente humedecidos se vuelven más flexibles. De este modo, es más fácil alisar las arrugas con unas pocas pasadas de plancha. Así que para evitar el efecto arrugado y conseguir un planchado liso, ¡prueba a emplear un pulverizador de agua!
Recuerda eliminar la cal de la plancha
¿Tiene tu plancha cal acumulada alrededor de las salidas del vapor?
Cuando uses una plancha (o un centro de planchado), es muy recomendable utilizar agua desionizada. Pero una vez que acabes de planchar, ¿qué debes hacer?
Lo ideal es eliminar el agua, ya que puede provocar una acumulación de suciedad y minerales. La exposición prolongada a minerales como la cal acaba obstruyendo los orificios del vapor, lo que disminuye las prestaciones de la plancha con el tiempo.
Utiliza un vaporizador para ropa
¿Harto de sesiones interminables de plancha?
¡Prueba con un vaporizador! Una técnica excelente para dar frescura con rapidez a la ropa que ya has usado o que lleva mucho tiempo en tu armario; ahora ya puedes dejar de utilizar la minitabla para mangas o incluso la propia tabla de planchar. Una vez que hayas sacado la prenda de la secadora, cuélgala en una percha, enciende el vaporizador ¡y listo!
Altamente eficaces incluso con tejidos delicados, los vaporizadores te permiten planchar una camisa en 5 minutos, y sin tener que usar una tabla de planchar. ¡Un estupendo ahorro de tiempo y espacio!
Como excelente alternativa a la plancha tradicional, este aparato rápido y eficaz revolucionará tu manera de planchar. Tanto si eliges un vaporizador portátil como uno vertical, ¡di adiós a las arrugas incluso de las prendas más gruesas!